Muebles de recibidor modernos

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Los muebles de recibidor modernos constituyen la bienvenida de nuestra casa, la primera carta de presentación. Un buen motivo para que elijamos los muebles de recibidor modernos acorde a la personalidad de nuestro hogar pero, sobre todo, planteándonos una cuestión importante: si van a ser meramente decorativos o, por el contrario, van a tener una función utilitaria.

Porque no nos engañemos: los muebles de recibidor no solo tienen un valor decorativo sino, además, cuentan con un papel emocional. Por un lado, suponen la despedida de nuestra intimidad cuando la abandonamos y ese último repaso a nuestro aspecto; por otro, son una auténtica isla en la que depositar al volver a casa todo el peso del día. Una manera de dejar el mundo más allá de nuestra puerta para dedicarnos, únicamente, a disfrutar de nuestro tiempo en casa como queramos.

Por estos motivos, elegir correctamente los muebles de recibidor modernos que vestirán la entrada de nuestra casa pasa por no tomar la decisión a la ligera sino, más bien, por plantearnos los pros y los contras antes de apostar por el mueble definitivo.

Las claves para escoger tus muebles de recibidor modernos

Cuando empezamos a escoger nuestros muebles de recibidor modernos hay muchas cuestiones a tener en cuenta. Por supuesto que el punto de partida son las dimensiones, ya que estas determinarán el número y tamaño de los muebles y accesorios que necesitamos. La máxima a recordar en todo momento es que este espacio tiene una función útil en nuestra casa y que hay que evitar sobrecargarlo a toda costa.

Tan importante como el tamaño, del que ya hemos hablado anteriormente, son las proporciones. En el diseño moderno, la simetría o la total ausencia de ella es la clave. Y, atención, porque aunque parezca increíble, la asimetría es mucho más difícil de lograr. Si perseguimos este objetivo es necesario recordar que esta no tiene que ser al azar sino como resultado de enfrentar elementos opuestos como tamaños, puntos de fuga o colores.

Jugar con el orden y el equilibrio es mucho más sencillo, sobre todo si contamos con poco espacio. Recomendamos apostar por un mueble central que descanse sobre la pared y construir el resto de la decoración apoyándonos en él, jugando siempre con números pares o tríos. Por ejemplo, podemos optar por una consola de hierro forjado y colocar sobre ella dos jarrones a juego. Encima, pondremos un espejo grande, elemento clave en nuestros recibidores. Por último si queremos apuntar para nota, podemos escoger tres pequeños cuadros para colocarlos a uno de los lados del espejo y jugar ligeramente con la asimetría.

¿Pequeños o grandes? Cuál es la ventaja

Lógicamente y más allá de preferencias personales o del espacio, está claro que los muebles de recibidor tendrán que adecuarse al espacio del que dispongamos y con una acotación más: si están situados a continuación de la entrada, que no se interpongan en el paso holgado tanto para entrar como para salir.

Muebles recibidor grande

Si disponemos de un recibidor grande, jugar con los elementos con los que decoraremos es casi más una cuestión de gustos personales que de espacio. El disponer de un lugar amplio nos permitirá utilizar lo que se consideran muebles fundamentales de cualquier recibidor: una consola o cómoda, un espejo (que puede estar suspendido en la pared o apoyado sobre el mueble) y otros accesorios (como un perchero, por ejemplo).

Los recibidores de grandes dimensiones nos permitirán, además, jugar con otros elementos decorativos como puede ser una butaca, banqueta o, incluso, un banco.

Banco recibidor

Pero no nos centremos solo en los grandes espacios sino, más bien, en los pequeños. En esos coquetos recibidores que, a pesar de sus dimensiones, pueden tener todo lo imprescindible para ser útiles y a la vez acogedores. Para este tipo de recibidores, lo ideal es optimizar el espacio optando por  consolas (ocuparán poco y, además, nos darán servicio) y un espejo (para hacer visualmente más amplio el espacio).Discretos y coquetos, este estilo de muebles recibidor no solo decorarán sino que además resultarán más que útiles.

Si, como decíamos antes, la intención de esos muebles recibidor es únicamente funcional podemos resolver la carencia de espacio centrándonos en un elemento de servicio: el perchero. Un mueble con el que podemos jugar para convertir en algo mucho más personal.

Perchero para recibidor

Muebles para entradas: estilos

Definir la personalidad de este espacio independientemente de su tamaño pasa por elegir el look adecuado para este lugar de la casa. Algo que haremos partiendo de una base: aquello que más se adecua a nuestro estilo personal. Y decimos esto porque, independientemente del resto de nuestro hogar o bien de manera coordinada, el recibidor puede funcionar a la perfección como un espacio independiente. O, lo que es lo mismo, ser un lugar completamente diferente al resto o bien en la misma línea.

Para quienes quieran experimentar con distintos estilos dentro de una misma casa, os invitamos a encontrar en esa contraposición estética nuestra propia personalidad.

Consolas de forja como este modelo Tarifa pueden convivir con estilos de decoración radicalmente opuestos a sus líneas limpia de diseño.
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Consola de forja

Consola de forja

Así, podemos reflejarla conjugando muebles para entradas de estilo vintage con una decoración con guiños clásicos en el resto de la casa; una entrada en la que la forja sea protagonista en convivencia con un hogar decorado en un estilo nórdico o rústico; o bien contar con un recibidor minimalista que tan solo disponga de un estante y un espejo aunque nuestra casa esté marcada por un estilo más barroco.

Tantas opciones como espacios, tantas otras como estilos. Un mundo, grande o pequeño, de posibilidades para dar la bienvenida a nuestra casa.

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    2018-10-19T16:05:34+02:00