La entrada de nuestra casa es la primera carta de presentación. Una bienvenida tanto para nosotros como para cualquiera que atraviese nuestro umbral que no solo debe reflejar la personalidad de nuestra casa sino, también, ser útil en el día a día.
Para ello, la elección de muebles de entrada es fundamental para que este espacio cumpla con estos dos factores. Algo que no podemos hacer a la ligera sino que estará predeterminado, básicamente, por el tipo de espacio de recibidor del que dispongamos.
Porque, más allá de nuestros gustos personales, está claro que no podremos jugar con los mismos elementos en un recibidor pequeño que en uno de grandes dimensiones.
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Así, veamos algunos consejos fundamentales que tendremos que contemplar a la hora de decorar con muebles de entrada nuestro recibidor. Unos que dependerán de cómo sea este espacio de nuestra casa.
Muebles para una entrada pequeña
Los recibidores pequeños no tienen razones para quedar desatendidos, algo que muchas veces creemos cuando el nuestro es así y necesitamos decorarlo convenientemente.
Para empezar, tengamos en cuenta que un recibidor (más allá de valores estéticos) siempre ha de tener un carácter puramente práctico, por lo que pararnos a pensar qué esperamos de él a nivel de servicio nos ayudará a resolver las necesidades de espacio y será determinante en la elección de los muebles de entrada.
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Además de optar por muebles que ocupen poco espacio, en los recibidores pequeños es clave tratar de aprovechar el espacio al máximo en vertical. Con esto nos referimos a que la pared puede ser un buen soporte para colocar tanto una estantería (que hará las veces de consola) como un zapatero (que nos resolverá el tema de dejar el calzado al entrar en casa, a la vez que nos proveerá de un soporte en el que dejar las cosas al llegar de la calle).
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Si la intención que tenemos para este espacio es más decorativo que otra cosa, también podemos optar por utilizar un pequeño banco o una banqueta de dormitorio.
No solo nos permitirá dejar el abrigo o el bolso al entrar en casa, sino que también podemos utilizar el espacio que hay bajo él para almacenaje. Ya sea para depositar calzado o, en el caso de haber niños en casa, juguetes varios nos resolverá de una manera práctica el dónde dejar esas cosas que pueden estorbar en otros ambientes como el salón.
Consolas de bajo perfil, como este modelo Marsella, nos darán servicio y decorarán la entrada.
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Muebles para una entrada estrecha
Si nuestro recibidor es estrecho, el ejercicio de planificar nuestros muebles de recibidor es mayor. Fundamentalmente, porque de ellos dependerán aspectos tan importantes como la fluidez del espacio, el peso visual del conjunto o la sensación que su iluminación nos genere al estar en ese espacio.
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Para empezar, tendremos que optar siempre por muebles recibidor de bajo perfil. Una manera fundamental no solo de que no entorpezcan el paso del espacio sino, también, de que no carguen visualmente en exceso el recibidor (haciéndolo, estéticamente, incluso más pequeño de lo que puede ser). Por estos motivos, es importante que analicemos bien el espacio y tengamos en cuenta que, quizás, con una simple balda o consola estrecha podemos resolver nuestras necesidades prácticas del día a día.
Añadido y cuando se trata de una entrada estrecha, tendremos que sacarle todo el partido posible a la verticalidad. O, lo que es lo mismo, buscar optimizar al máximo el espacio de las paredes para hacerlas útiles para nuestras necesidades colocando percheros, baldas o cualquier otro mueble recibidor en ella. De esta forma, lograremos que el espacio de paso no se vea entorpecido por nuestros muebles.
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Y, por último, un aspecto vital: la iluminación. Si contamos con que es un espacio estrecho, tendremos que jugar con las luces para darle amplitud. Algo que podemos lograr apostando por colores claros (tanto en lo que respecta al color de la pintura como de los accesorios y muebles de entrada) pero, también, jugando con la magia de los espejos.
Será gracias a ellos como consigamos generar mayor luminosidad y, por ende, hacer así el espacio más amplio.
Muebles para una entrada grande
Gozar de un buen espacio en el recibidor nos facilita inmensamente la tarea de elegir muebles de entrada. Básicamente porque los metros cuadrados nos darán cuartelillo a la hora de buscar un equilibrio entre lo que nos apetece por capricho decorativo, y lo que realmente necesitamos a nivel práctico.
Sin embargo, un consejo: aunque tengamos un buen espacio, el ejercicio de análisis de cómo vamos a estructurar el recibidor no debe caer en el olvido. De esta manera, logramos que tanto los muebles de entrada como aquellos accesorios decorativos tengan su propio hueco.
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Para las entradas de gran tamaño, podemos jugar a crear dos ambientes. Por un lado, utilizar muebles de entrada en una zona para cumplir con el carácter práctico que todo recibidor debe tener. Así, consolas o incluso muebles de gran volumen y espejo serán en sí mismos un espacio único dentro de un ambiente cumpliendo con las necesidades fundamentales que le exigimos a esta pieza de la casa.
Como complemento a esta zona de carácter utilitario, podemos jugar con otro espacio en el que demos rienda suelta a nuestros caprichos. Así butacas, banquetas de forja o divanes serán acompañantes de plantas de gran tamaño, esculturas y otros accesorios que nos apetezca tener en este espacio para dejar nuestro sello personal en el espacio.
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Tres espacios distintos con infinitas posibilidades si sabemos jugar con los muebles de entrada adecuados y los accesorios. Porque si algo tiene la decoración, además de ser capaz de embellecer un espacio, es que despierta nuestra creatividad.
Así que ¡a jugar!
